Usos comerciales del Wolframio
LA COMPAÑÍA
Más del 50% de las reservas europeas de Wolframio
En el Top 5 de las minas de Wolframio en Europa
La mayor reserva de Wolframio europea
Saloro, fundada en España en 2004, es una compañía dedicada a la producción y comercialización de wolframio, un metal reconocido como “Materia prima fundamental” por la Unión Europea.
La primera unidad productiva es la mina de Barruecopardo, ubicada en la provincia de Salamanca. Después de una inversión por Saloro de alrededor de 100M€, la mina de Barruecopardo esta aumentando ahora su producción para alcanzar la capacidad de generar el 15% de la producción mundial (fuera de China) de concentrados de wolframio, convirtiendo la mina de Barruecopardo en un recurso natural a escala mundial.
El elevado valor de esta materia prima y su compromiso social lleva a Saloro a gestionar este recurso natural importante acorde a sus principios de eficiencia, responsabilidad y sostenibilidad.
Para complementar a su primera unidad productiva, Saloro está valorando realizar nuevas inversiones en el sector del wolframio en diferentes puntos del planeta. Asimismo, Saloro contempla otras oportunidades de fusión y adquisición, con el fin de convertirse en la principal compañía minera de Occidente en su especialidad.
VALORES
Nuestra actividad gira en torno a:
El ciclo de vida de una implantación de concentración de mineral con Wolframio
Utilidades del wolframio
ABANICO DE USOS
El wolframio posee cualidades únicas que permiten mejorar la vida de las personas y el desarrollo económico de las sociedades. Algunas de ellas son su especial dureza, su capacidad para soportar el calor y su elevada densidad. Sin el wolframio no existiría por ejemplo la industria de la aviación civil, gran parte de la electrónica o sería mucho más difícil producir electricidad de una manera sostenible.
Así, el tungsteno (nombre que también recibe este mineral) es esencial como componente en herramientas de corte utilizadas para perforar metales, hormigón o roca. También es idóneo para elementos críticos de maquinaria, termosensibles y resistentes al desgaste, como por ejemplo, las válvulas de un motor.
Por su resistencia al calor y su aguante, así como por su conductividad eléctrica, el wolframio también es de especial utilidad en aparatos electrónicos y como punto de contacto en circuitos eléctricos. También como componente termorresistente (pantallas LCD). Además, por su elevada densidad, el wolframio se usa como peso o contrapeso en aplicaciones específicas de maquinaria, como es el caso de los alerones de aeronáutica.
