Saloro, fundada en España en 2004, es una compañía dedicada a la producción y comercialización de wolframio, un metal reconocido como “Materia prima fundamental” por la Unión Europea.
La primera unidad productiva de Saloro es la mina de Barruecopardo, ubicada en la provincia de Salamanca. Después de una inversión por Saloro de alrededor de 100M€, la mina de Barruecopardo esta aumentando ahora su producción para alcanzar la capacidad de generar el 15% de la producción mundial (fuera de China ) de concentrados de wolframio, convirtiendo la mina de Barruecopardo en un recurso natural a escala mundial.
El foco de la empresa en sus operaciones en Barruecopardo es mantener una producción sostenible y de alta calidad, compatible con el cuidado del ecosistema. SALORO está comprometida al 100% con las normas internacionales más estrictas en materia de salud, seguridad y medioambiente, habiendo recibido las máximas certificaciones de la industria al respecto.
El proyecto de Barruecopardo
El proyecto de Barruecopardo, ubicado en la provincia de Salamanca (España), tiene más de 100 años de historia minera. Aunque la mina original cerró en 1982, siendo el emplazamiento de extracción de Wolframio más importante de España, SALORO decidió retomarlo, actualizándolo por completo a las necesidades actuales.
El Wolframio ha sido declarada por la Unión Europea como estratégica, por lo que la mina de Barruecopardo tiene una amplia relevancia a nivel continental, al ser uno de los más importantes productores de concentrado de Wolframio de Europa. El ritmo de producción anual de la instalación es de 2.600 toneladas de trióxido de Wolframio (WO3). Se trata de la séptima mina de Tungsteno más grande del mundo.
La producción comenzó en 2019, después de terminar de ultimar las obras, que comenzaron en 2014, cuando se tuvieron todos los permisos necesarios en regla. La mina de Barruecopardo es una explotación minera a cielo abierto.
Así, el proceso en la mina ha sido modernizado, para funcionar de forma eficiente, responsable y sostenible, a la vez que produce un concentrado rico en Wolframio, concretamente, con una ley de Trióxido de Wolframio (WO3) superior al 65% y un contenido muy bajo de elementos penalizadores.
La modernización de la mina empezó haciéndose sobre la antigua excavación y sus alrededores. De esta manera, se vuelven a aprovechar las zonas afectadas por actividades pasadas. Asimismo, el resto de los recursos de la mina se han aprovechado, confirmando el compromiso de SALORO con el cuidado del medioambiente. Por ejemplo, el agua ácida –que había quedado abandonada en la antigua corta– se ha limpiado para su reutilización, sin necesidad de gastar otros recursos hídricos para el proyecto.
La mina de Barruecopardo
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COMIENZA LA ACTIVIDAD EN LA VIEJA MINA DE BARRUECOPARDO
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APOGEO DE LA PRODUCCIÓN
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DESARROLLO DE NUEVA CORTA EN LA ZONA SUR
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CIERRE DE LA MINA
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REAPERTURA DE LA MINA
Datos adicionales
– Primeras operaciones (1930-1960) no mecanizadas de 200 metros de largo y 5-30 de ancho –
– Segunda corta (mecanizada): 800 metros de largo, 100 de ancho y 80 de profundo –
– Producción aproximada (1960-1982) de 10,2 millones de toneladas de MINERAL (4.000 toneladas de concentrado comercializable) –
– Efecto positivo en las localidades colindantes, con creación de empleo y creación de riqueza en la zona –